Los colores y el Feng Shui

El color es una parte de suma importancia en nuestra percepción, nuestra vida está llena de color... ropa, maquillaje, frutas, verduras, etc. Es una energía que debemos controlar, pues cada uno de los colores que vemos influye también sobre nuestro estado de ánimo.
Veamos cómo aprovechar esa energía en la decoración de nuestra hogar.

Para el Feng Shui, el rojo se puede usar para atraer o dirigir el chi hacia donde se quiera, como por ejemplo un rincón oscuro. Es un color que debe usarse con moderación, sobre todo tonalidades como el rojo oscuro. No obstante, personas con depresión pueden verse beneficiadas con este color, por lo que es buena idea incorporar pequeños elementos en nuestra decoración con él.
Los colores tierra son ideales para salas de estar y dormitorios, pues son inductores de la pasividad y el descanso. Si además contamos con personas con cierta inestabilidad física también es recomendable, al igual que con las personas muy excitables, pues es un color que transmite apoyo firme y quietud.
El amarillo, en toda su gama, nos aportará alegría. Es un color realmente aconsejable en la cocina, pues es un lugar en el que solemos comer con la familia. Además también es una opción excelente para las habitaciones infantiles.

Las tonalidades azules aportarán tranquilidad y frescura. Son ideales para crear estancias armónicas y equilibradas. Asimismo, el negro es ideal para aportar también un poco de sensualidad al ambiente.
Ambos colores se pueden usar para decorar dormitorios y baños. Conseguiremos así un espacio relajado, lleno de armonía pero también con ciertos toques de sensualidad.

Finalmente, nos fijamos en tonos como el verde, o incluso los marrones. Esta combinación puede ayudarnos a fomentar la seguridad dentro del hogar. Pueden usarse en la mayoría de los espacios, teniendo en cuenta que el verde nos dará vitalidad y esperanza y el marrón estabilidad.

Esperamos que esta guía te haya servido... aprovechá la nueva estación para redecorar tu casa y renovar la energía.